martes, 6 de noviembre de 2007

Foro de las culturas

Conferencia de Greenpeace e Isis y la serpiente emplumada

Les seré honesto: fue inevitable para mí no poner el 100% de la atención necesaria en la conferencia de Greenpeace, por lo cual, no todo lo que diga se va a centrar en el contenido del evento. Más bien, hablaré de lo que más me llamó la atención de esta conferencia, que fue precisamente que se haya incluido a tres individuos que no son de México para hablar de un problema que afecta a todo el mundo.

Primero, tengo que hablar de la manera de hablar de cada quien. El de Luxemburgo, tenía un acento inglés bien cool, pero al mismo tiempo, noté en él, cierta aproximación informal hacia nosotros, lo cual se me hizo genial, pues hacía más amena la presentación. El que sigue fue el japonés, el cual de plano se me hizo aburridísimo, por que aparte de tener serios problemas de dicción, hablaba solamente de la segunda guerra mundial y las bombas atómicas, que se me hace bien, pues jamás había tenido la perspectiva de un japonés acerca de esto. Dolor inmenso fue lo que más noté en lo que podía escuchar (entre ronquidos). Ahora, antes de adentrarme a la latina, quiero hacer mención de cierta cosa que noté en el europeo y el japonés. Increíblemente, no sentí a ninguno como si se sintiera (valga la redundancia) en casa. ¿A qué me refiero? Los sentía muy distantes, como si le hablaran a un alienígena. Bueno, el de Luxemburgo tal vez no tanto pero aún así, sentía a ése hombre como que medio perdido. Ahora, ¿qué pasa cuando habla la señora latinoamericana? Increíblemente, se encuentra esa unión y lazo, esa manera de crear borlote dentro de los mexicanos presentes en esta platica, fue creo que la plática más interesante y más amena de todas, pero ella sabía como platicar con nosotros, ella sabía como somos y ella es como nosotros, con cierta calidez que solamente un mexicano puede comprender. Eso hace que me pregunte: ¿Qué tan importante es la cultura como factor de unión social? ¿Es más fácil estar unido a alguien de latinoamérica que con alguien de otra región?

Isis y la serpiente emplumada: wow y más wow. Creo que ha sido una de las exposiciones más interesantes que he visitado. Me pareció fabulosa. Cuando entras a la exposición y ves que a tan sólo unos centímetros de ti esta una obra maestra de arte que fue creada hace 3,000 años. ¡Increíble! Pero bueno, lo que también se me hace increíble es la humanidad con la cual se manejaban esas culturas. Ellos sí eran humanos en mi opinión y no les resultaba difícil admitir eso. A lo que me refiero, es que sus mitos, hablan de la relación del hombre con la naturaleza, con sí mismo incluso. Admiten que no son perfectos, que existe alguien mayor a ellos que contiene una perfección mayor. No son tan penosos con su sexualidad, entre otras cosas que me parecieron interesantes. Algo que tengo que decir que me llamó demasiado la atención, fue el "clash" de las culturas que se dieron en Egipto. Si usted (maestra) ha ido a la exposición, verá como cambia la concepción del arte cuando los griegos (o romanos, no recuerdo) se apoderan de egipto, inreíble es que todo cambia en la cultura. Las estatuas se tornan más helenísiticas, incluso la cultura cambia. Ya no es lo mismo cuando llega otra cultura y se pierde esa identidad que anteriormente tenían. ¿Es eso lo que a nosotros nos pasa? Eso de los griegos invadiendo a egipto no difiere de la globalización actual. Pero bueno, en cuanto a México, lo que más me llamo es que Quetzalcoatl era un chango, una serpiente, un tipo raro, un dragon, una serpiente emplumada, un simbolito raro, etc. ¿Cómo puede ser un dios tantas cosas? Weird....

1 comentario:

Edith Beltran dijo...

creo que no es un dios tantas cosas, si no que es la manifestación del dios en todo... ¿no?
Interesante tu perspectiva de greenpeace por medio del los acentos =)